lunes, 29 de octubre de 2012

Cuarta hipótesis.

TÜRKIYE
    Fue un gran viaje, pero no todo salió como estaba previsto. La falta de nuestras pertenencias durante parte de la estancia en Turquía, fue una experiencia que me perturbó (las maletas se retrasaron dos días).
   Durante el trayecto Antalya-Burdur, el cual hicimos en autobús, no dejé de pensar en cómo haría para que este percance no alterara esta nueva experiencia. Sí, podían dejarme ropa y todo lo que necesitara, pero no sería lo mismo, yo quería mi maleta. Era algo que nunca pensé que podía ocurrirme. Pensaba que este tipo de cosas le pasaba a otra gente. Pues nosotros éramos esa otra gente. Examiné la situación y aprovechando mis deberes de filosofía me puse a pensar y a hacerme preguntas. Me di cuenta de la importancia que tienen nuestros bienes materiales para cada uno de nosotros. Algo que ignoraba hasta el momento.

¿HASTA QUÉ PUNTO SON IMPORTANTES LOS BIENES MATERIALES?
    Los bienes materiales son cosas que se obtienen a lo largo de la vida y tienen un valor. Ya desde la Antigüedad, los que más bienes poseían eran las personas de más poder. Luchaban entre ellos para conquistar territorios, vagaban por tierras en busca de tesoros y los matrimonios eran por conveniencia. Surgió el comercio y más tarde la moneda. Desde entonces el dinero ha sido lo que mueve el mundo. Hoy en día es el bien material más importante para las personas.

   Se dice que los ricos son los que mejor viven ya que cuanto mayor es su poder y riqueza, su nivel de vida aumenta. Cuando el nivel de vida aumenta, se supone que la felicidad también lo hace. Pero,¿realmente se puede conseguir la felicidad con el dinero y el poder? Para mí, la respuesta es clara, NO. Yo no sería más feliz con más dinero. Si me pudiera comprar lo que quisiera, cada vez querría más y más, hasta hartarme. Las personas necesitamos querer algo que no podemos tener para poner un poco de chispa en nuestras vidas. En eso se basaba el amor cortés de la Edad Media. Los hombres alababan a una mujer, a la que veían como una diosa y a la que no podían tocar. Esto permitía mantener el deseo y no poder cambiar de opinión sobre ella.
   Si  la riqueza fuese directamente proporcional a la felicidad, ¿qué pasaría con los pobres? ¿Acaso ellos no pueden ser felices? Seguramente habrá más pobres felices que personas ricas. Lamentablemente así de mal  repartida está la riqueza (según la ONU, el 2% de la población más rica tiene más de la mitad de la riqueza del mundo). Los pobres son felices con lo que tienen porque se conforman con eso y no pueden aspirar a más dadas sus condiciones. El ser humano es avaricioso por naturaleza. Si le das la mano, te cogen el brazo. Y puesto que los ricos son seres humanos, la cosa no cambia. Incluso me atrevería a decir que la riqueza es inversamente proporcional a la felicidad. Cuando más tienes, más necesitas, y cuanto más necesitas, más complicado es ser feliz.

   Durante mi estancia en Turquía me di cuenta de que allí creen que viven bien. De hecho, para ellos, su nivel de vida es alto. Sin embargo, para mí, Turquía no es uno de los países más desarrollados, y por lo tanto, no considero que tengan un buen nivel de vida. Los turcos son felices con lo que tienen y no necesitan nada más. En los países más desarrollados necesitamos porque conocemos. Si no conociéramos, no necesitaríamos.

                           "No es más rico el que más tiene, si no el que menos necesita"

   Los bienes materiales son esenciales cuando te acostumbras a ellos. ¿Quién imaginaría ahora un mundo mejor sin whatsapp? Pero si lo pensamos ¿quién necesitaba whatsapp cuando no existía? En el caso de desaparecer, el mundo no sería igual que antes de su invención. El proceso es: lo inventamos. lo conocemos, lo queremos y cuando lo tenemos, lo necesitamos; cuando debería ser: lo necesitamos, lo inventamos, lo usamos.

   A veces he llegado a pensar que el desarrollo se está cargando el mundo. Hay bienes materiales por todos sitios. El homo sapiens se contentaba con piel para protegerse del frío; ahora necesitamos miles de complementos que no sirven para nada. El homo sapiens adornaba sus cuevas con pinturas rupestres; ahora tenemos cuadros, alfombras, estatuas... que tampoco sirven para nada. Podrías decirme que sí, que sirven para decorar, ¿pero es realmente indispensable? Esta es una sociedad de consumo. El verdadero fin de todo esto es ganar dinero.
   También el desarrollo tiene el fin de aumentar nuestro nivel de vida, pensando siempre en nuestro bienestar. Siempre andamos inventando robots que hagan el trabajo que no nos gusta hacer (hasta hay aspiradoras programables que no necesitan ni siquiera una mano que las guíe). ¿A dónde queremos llegar con esto? Como sigamos así, acabaremos por entregarle nuestras vidas a los robots. Pero claro, esto no importa mientras haya dinero por medio.

   La verdad es que mi vida no sería igual sin bienes materiales ya que estos son importantes para el día a día. Pero no considero que todos sean esenciales. Los bienes que sí son esenciales y que tienen verdadera importancia son los bienes humanos. En el caso de perder los bienes materiales, seremos felices teniendo a los seres queridos cerca. Por el contrario, en el caso de perder a los seres queridos, los bienes materiales no llenarán el vacío.

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